Atelier
El edificio de Terramar sufrió dos renovaciones, una sobre otra, y si normalmente un edificio debería tener 10 columnas, este edificio tenía 20. El reto del diseño era convertir un problema en una ventaja.
Cada columna está pensada como una escultura cubierta con dos tipos de materiales: yeso y mimbre. La mitad de las columnas se han cubierto con yeso blanco que aporta frescura al ambiente. Sólo se ha creado un tipo de molde, que se ha reflejado en cada columna. Como se ha eliminado la junta mediante el pulido, el resultado ha sido una columna que da la impresión de ser una pieza singular.
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